Advierten que en dos años, el valor real de la hacienda retrocedió 17%

La recuperación del stock ganadero se verá rápidamente frenada si la producción sólo depende del mercado interno, señalaron economistas de la Fundación Mediterránea.

Advierten que en dos años, el valor real de la hacienda retrocedió 17%)

En los últimos 24 meses, entre septiembre de 2010 y septiembre de 2012, los precios de la hacienda vacuna que pasa por el mercado de Liniers perdieron entre un 14 y un 17 por ciento de su valor a precios constantes. El auspicioso proceso de recuperación del stock ganadero “puede encontrar rápidamente sus límites si la colocación de los excedentes de producción depende básicamente del mercado interno, tal como viene sucediendo”, advierte un documento de trabajo elaborado por Juan Manuel Garzón y Nicolás Torre, economistas del Ieral-Fundación Mediterránea. Bajo el título “¿Podrá sostenerse la recuperación de la ganadería?”, señalan que la cadena está evidenciando claros problemas de competitividad externa a los precios y costos actuales, con una dinámica en las variables domésticas relevantes (tipo de cambio, salarios, tarifas de servicios, impuestos) que, de no modificarse en los próximos meses, deteriorará aún más las condiciones para colocar con rentabilidad estos productos en el mundo. Según publicó La Voz del Interior, si el mercado al que puede vender la cadena se limita al frente doméstico, los aumentos de producción llevan casi inexorablemente a una caída en términos reales del valor de la hacienda en Argentina. Eso lleva a una caída en la rentabilidad de los productores ganaderos y afecta la sustentabilidad económica, en particular de las explotaciones de menor tamaño, menor productividad y/o mayor costo de producción, dice el trabajo. En la comparación regional, a pesar de haberse reducido durante el último trimestre, el precio del novillo argentino en dólares continúa un 12 por ciento por encima de los valores promedio negociados en Brasil, país que integra el lote de los exportadores líderes de carne (junto con Australia, India y Estados Unidos). En relación con el consumo doméstico de carne bovina, se menciona el inicio de una recuperación. Según datos del Instituto de Promoción de la Carne Vacuna, este año se ubicará en 57,9 kilos per cápita. Pese a que este nivel está un 10 por ciento por debajo de la media para la última década (64,2 kilos por habitante), el consumo total de carnes (la sumatoria de bovina, aviar y porcina) sigue siendo una de las más elevadas del mundo (se calculan 114 kilos per cápita para 2012). Aun con el aumento que ha experimentado el precio mayorista del pollo durante septiembre (entre 10 y 15 por ciento), la carne de pollo sigue siendo muy competitiva frente a la bovina, pudiéndose conseguir un kilo de pollo entero por un tercio del valor del kilo de carne bovina (promedio simple de seis cortes: asado, bife angosto, carne picada, cuadril, nalga y paleta), cuando a fines de 2009 esta relación rondaba un kilo de pollo entero por medio kilo de carne bovina. Un hecho curioso en el que se fijan los economistas del Ieral es que en el pasado reciente la cadena bovina generaba en promedio casi el doble de divisas que la cadena láctea; pero en 2011 esta situación se revirtió y el valor exportado en lácteos se impuso con 1.527 millones de dólares contra 1.492 millones. Esta diferencia se amplificó con el correr de 2012: a septiembre, sus exportaciones alcanzan los 1.082 millones de dólares contra 883 millones de carne bovina. Otra cadena que ganó terreno es la aviar, basada en la carne de pollo. En 2002, las exportaciones de todo el segmento avícola representaban sólo el siete por ciento de las divisas ingresadas por la cadena de carne bovina. Hoy esta relación se encuentra en un rango de entre 35 y 40 por ciento.Los más y los menos La evolución del rodeo fue muy diversa en las principales 11 provincias ganaderas en los últimos nueve años. Por un lado, Salta está a punto casi de duplicar su rodeo. También creció en Santiago del Estero, Chaco, Formosa y Corrientes. Córdoba y San Luis retrocedieron 2,2 y 0,4 por ciento entre 2008 y 2011.