Exportadores tienen tanto maíz acumulado que frenan cualquier intento de alza de precios
La cosecha de maíz logró hacer pie gracias a una ventana de condiciones climáticas favorables. La recolección en zona núcleo llega a casi un tercio de la superficie comercial proyectada pero el avance representaba menos del 10% a nivel nacional debido al predominio de las siembras tardías en el centro y norte del área agrícola del país. Durante los últimos días el ingreso de camiones con maíz a los puertos del Up River fue el más elevado del año: 2.000 unidades en promedio. Sin embargo, no todo el maíz enviado a las terminales pertenece a la cosecha nueva. Una parte no menor del flujo observado corresponde a compromisos de entrega para estos días que involucran mercadería del ciclo comercial ya finalizado. Los exportadores han declarado compras por 20,9 M de T de maíz de la campaña 2013/14, aunque los embarques del período marzo-febrero totalizaron 17 M de T según el SENASA. El diferencial se explica por los stocks de maíz en poder de los exportadores en sus acopios e instalaciones de almacenaje en puerto más lo que habían adquirido sin recepción inmediata del grano, a través de operaciones forward con entrega pactada para la segunda quincena de febrero o durante marzo. La proliferación de este tipo de negocios provocó un cierre de campaña al 28 de febrero con elevado stock físico remanente. La razón por la que se presentó esta inusual circunstancia es el premio con el que operó el maíz con posición de entrega en febrero y marzo respecto del mercado disponible de plaza Rosario durante gran parte del segundo semestre del año pasado. El 45% de la colecta se desarrolló durante los meses de julio y agosto, bajo condiciones de mercado desfavorables para la exportación. En los meses siguientes los futuros de Rofex con delivery en abril promediaron más de u$s 10/ton por encima de los precios de contado, cuando lo usual sería observar un pequeño descuento. El fortalecimiento del consumo interno del segundo semestre le quitó competitividad a los traders, que concentraron sus energías en la originación para el tramo final de la campaña. Entre julio y diciembre de 2014 las faenas avícola y porcina experimentaron crecimientos interanuales del 2 y 3%, respectivamente, y la producción de etanol se expandió 30%. La mayor capacidad de pago de la exportación para la entrega diferida se apoyó en la pendiente en ascenso que mostraba la curva de vencimientos de los futuros de Chicago durante gran parte del año pasado. El mercado externo opera bajo el condicionante de los elevados inventarios en poder de países exportadores, a lo que se suma la amplia disponibilidad mundial de granos aptos para uso forrajero, como el sorgo o la cebada. Sin embargo, el cereal de origen argentino se mantiene muy competitivo para el comercio global, cotizando con un descuento superior a u$s 10/ton respecto de los precios FOB en el Golfo de México. De hecho, los exportadores locales tienen gran capacidad para originar a valores inferiores a los que sugiere la capacidad teórica de pago. Sobre finales de la semana esta última se encontraba apenas por encima de $ 1.000/ton, pero el mercado interno negociaba valores referenciales entre $ 900 y 920 por tonelada. La percepción es que cualquier deslizamiento a la suba en el precio local genera enorme atractivo en la oferta, superando las necesidades de compra de los exportadores.