Crece el uso de inoculantes en silajes de primavera

Por factores como rendimientos, costos de producción y la liberación temprana del lote para continuar la rotación con cultivos, la actividad se emplea cada vez más en pos de mantener las reservas forrajeras.

Crece el uso de inoculantes en silajes de primavera )

Un informe elaborado por Martín Auil, de Investigación y Desarrollo del área de Producción Animal de Becker Underwood, revela que "en los últimos años la superficie sembrada destinada a silajes de primavera ha aumentado considerablemente. Esto en parte se debe a factores tales como rendimientos aceptables, costos de producción razonables y la liberación temprana del lote para continuar la rotación con cultivos como soja o sorgo. A todo esto se suma que particularmente la última campaña (2011/2012) se caracterizó por un déficit hídrico marcado en el momento que el cultivo de maíz se encontraba en floración, lo que repercutió no solo en la calidad sino también en la cantidad de reservas forrajeras logradas". "En este contexto, los silajes de primavera juegan un rol protagónico, ya que nos permiten cubrir dicho déficit forrajero manteniendo constante la oferta de alimento, evitando repercusiones en la producción animal. Desde el punto de vista nutricional, y a diferencia del silaje de maíz y sorgo, los silajes de primavera constituyen una buena fuente de proteína además del aporte de fibra y demás nutrientes, lo que permite utilizarlo tanto en sistemas lecheros como de carne", indicó el informe. En ese sentido, Auil destacó que "es importante tener en cuenta que el ensilado es un proceso, y como tal, debe prestarse atención a cada etapa para lograr forrajes conservados de calidad. Estas etapas comprenden: cultivo, confección, conservación y suministro. A su vez, cada una de estas etapas presentan puntos críticos que debemos considerar tales como momento óptimo de picado, tamaño de picado, altura de corte, aplicación de inoculantes, dimensionamiento del silo, etc". "Para lograr la estabilidad y poder preservar la calidad del material ensilado es necesario que se produzca un proceso fermentativo bajo condiciones de anaerobiosis. Durante el mismo, las bacterias presentes en el material cosechado generan ácidos orgánicos a partir de los carbohidratos solubles, lo que disminuye el pH de la masa ensilada. Este medio ácido junto con las condiciones de anaerobiosis, inhiben el desarrollo de bacterias responsables de la putrefacción del material ensilado permitiendo mantener la calidad del forraje por un período prolongado", agregó. Y aseguró que "a pesar de que los silajes pueden confeccionarse a partir de una gran variedad de cultivos, éstos presentan diferente aptitud para completar el proceso fermentativo, debido en parte al contenido de carbohidratos solubles y de proteína propio de cada especie. Como se mencionara, los carbohidratos solubles actúan como sustrato bacteriano para el proceso fermentativo mientras que la proteína actúa como buffer impidiendo el descenso del pH. En el caso del ensilado de primavera, el bajo contenido de carbohidratos solubles, genera un lento descenso del pH de la masa ensilada comprometiendo la conservación de la misma". "Este hecho se suple mediante el agregado de inoculantes biológicos, los cuales están constituidos por una combinación de bacterias lácticas y enzimas. Estas últimas degradan los polisacáridos complejos de la pared celular en azúcares simples, mientras que las bacterias lácticas transforman dichos azúcares en ácido láctico. La inoculación con LactoSilo permitirá una rápida acidificación de la masa ensilada en las primeras 24 a 48 horas, lo que acarrea una serie de ventajas como la conservación de la calidad que poseía el cultivo al momento del corte, evita la proliferación de hongos y micotoxinas perjudiciales para el desempeño productivo de los animales, conservación en el tiempo y mejor aprovechamiento por los animales. Además LactoSilo posee bacterias que consumen el oxígeno residual evitando la degradación de nutrientes y en consecuencia la pérdida de calidad del silaje por aumento de la temperatura", explicó. Finalmente, Becker Underwood manifestó que "en definitiva, los silajes de primavera constituyen una excelente alternativa para ampliar las opciones de forrajes destinados a planteos de carne y leche. Por su parte, la aplicación de tecnologías tales como inoculantes, constituyen una de las claves para la obtención de forrajes conservados de calidad".